Francesca Woodman es mi fotógrafa favorita,
no se parece a nadie, sólo a ella misma. Ella hacía
fotografía y escribía sólo lo que le apetecía. Intensa
y surrealista no llegó a cumplir los 23 años.
Creo que ella fue un Ángel que nos dejó imágenes
de una Tierra que no se parecía a la Tierra,
sino a su alma brillante.
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